Primero recibimos la visita de Micaela, nuestra amiga la motoazada, que viene todos los años a visitarnos y con ella preparamos la tierra, se queda blandita y mezclada y ¡manos a la obra!.
Todas las semanas y si el tiempo no lo impide bajamos a sembrar de todo un poco: habas, trigo, ajos, zanahorias, tomates, espinacas,... Y así está de bonito y cuidado, porque contamos tambíen con la ayuda del abuelo Antolín que nos prepara surcos y las eras.
En el invernadero hemos intentado también sembrar de todo un poco y hasta nos hemos atrevido a transplantar en recipientes de yogur que nos hemos llevado a nuestra casa para cuidarlo.
Además de pasárnoslo superbien aprendemos un montón de aspectos naturales.
2 comentarios:
Jooo, yo quiero ser de nuevo niña e ir a vuestro cole... os lo pasáis genial.
Prado.
Animo chicas nos queda poquito y no hay que rendirse podemos seguir haciendo maravillas esta última semana, somos magas expertas convirtiendo el esfuerzo en resultados auténticos. Besitos.
Vuestro apoyo.
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